Jacinto el justiciero!

Allá por los años 80, había un héroe enmascarado que rescataba a un par de niños de los peligros en los que estos se metían. Este héroe tenía un traje verde y amarillo, y se transformaba apretándose la nariz. Salía por las noches a rescatar a Sebastián y Lorena, sus propios hijos (que nunca reconocían al valiente enmascarado), para volver a la noche siguiente en búsqueda de una nueva aventura. En el momento más riesgoso, Jacinto se quedaba dormido, y eran los espectadores, los encargados de despertarlo.

Jacinto el justiciero cobraba vida en la habitación de nuestro cuarto, gracias a la imaginación y los dotes istriónicos de mi viejo. En las grabaciones, que se perdieron con el tiempo, se escuchaban las risas y los cuestionamientos de dos niños muy parecidos a Lorena y Sebastián, causalmente con las mismas iniciales.

Hoy quiero rescatar a este héroe anónimo, por más doloroso que esto me resulte, antes que se pierda en los recovecos de mi memoria. Lo quiero rescatar, porque hay dos niñas que dentro de unos años necesitarán de un héroe a la hora de los cuentos  y yo seré quien saque la capa y el disfraz y me lo ajuste al cuerpo.Para que esas dos niñas puedan vivir la esencia de ese héroe anónimo, que se fue hace muy poco tiempo, pero que, como todos los personajes aventureros, esta esperando que un niño lo necesite para cobrar vida y volver a surcar los cielos. Para que Inés y Miranda, miren hacia arriba y digan "Ahí va Jacinto el Justiciero"!!!!